La inseguridad y las afectaciones para el sector privado en México: algunas recomendaciones

La inseguridad y las afectaciones para el sector privado en México: algunas recomendaciones

El Gobierno de México tiene un problema muy delicado en materia de inseguridad. El avance de la criminalidad no cede y parecen insuficientes los esfuerzos del Gobierno para hacerle frente. Ya lo hemos dicho anteriormente, nuestra recomendación en términos generales versarían en tres ejes: 1) que el Gobierno no busque una sola batalla decisiva, eso solo desgastará el esfuerzo y no logrará el resultado que busca el Presidente; 2) que se construya una comunidad de inteligencia y una ley de inteligencia y 3) que se produzca una nueva doctrina, y por supuesto la construcción de un marco jurídico que lo acompañe, sobre seguridad nacional, pública y privada que compartan todas las áreas, niveles y órdenes de gobierno –incluso los demás poderes constitucionales y todas las fuerzas políticas del país-, sobre todo vinculando a la comunidad científica a los asuntos de seguridad de una manera estructurada. Sin embargo, el sector privado está viviendo su propio viacrucis en materia de seguridad. En específico, a pequeñas, medianas y grandes empresas le preocupan tres cosas. Primero, ciertos delitos como el robo, la extorsión y los secuestros; en segundo lugar, les preocupa el aumento de la frecuencia con la que les ocurren estos y otros delitos; y en tercer lugar, les preocupa las decisiones que tomará el Gobierno en materia de combate a la inseguridad y que repercutirá directa o indirectamente en los niveles de inseguridad. Para atender la primera y segunda preocupación, generalmente los empresarios han acudido a una serie de medidas. Entre las principales se encuentran: escoltas, custodios en instalaciones, blindajes, armas, alarmas, circuitos cerrados de televisión (CCTV), instalación de rastreadores satelitales...
La compleja relación de México con el terrorismo

La compleja relación de México con el terrorismo

México, desde antes de los ataques terroristas del 11S en Estados Unidos de América, ha tenido dificultades para entablar un diálogo que implique el concepto de terrorismo. Cada que se presenta un atentado, y que se busca analizar, demostramos serias carencias conceptuales para explicar esa violencia política que ha marcado las relaciones internacionales durante la primera década del siglo XXI. El concepto de terrorismo innegablemente es complejo e implica un nivel de análisis interdisciplinario que crea grandes discusiones a nivel internacional. En México esto no sucede, las dificultades para explicar el terrorismo hacen que pongamos poca atención y que en general se caiga en lugares comunes, en ocasiones incorrectos. A la de por sí complicada definición política, sociológica y legal, que tiene el terrorismo en todo el planeta, en México hay que sumarle una posición gubernamental ambigua, la cual busca evitar un compromiso principalmente político en contra de este tipo de violencia. Dicha postura es derivada de la carga ideológica que el terrorismo ha implicado históricamente y del uso que se le ha dado para catalogar de negativo el uso legitimo e ilegitimo de la violencia para obtener objetivos políticos. El termino terrorismo ha sido utilizado por gobiernos de occidente con déficit democráticos, no el mexicano, para definir “negativamente” las demandas del otro, del luchador social y de todo aquel que rete al status quo; pese a que, en los inicios del siglo pasado, el término fuera utilizado con una connotación un tanto positiva, por el trasfondo político y de liberación social que implicaba y que diferencia al terrorismo de la criminalidad enfocada en el beneficio económico e individual....
Terrorismo, crimen organizado y la visión metropolitana de la seguridad

Terrorismo, crimen organizado y la visión metropolitana de la seguridad

Las metrópolis, los lugares donde en 2050 desarrollará su vida 68% de la población mundial, son lugares preferentes para las actividades criminales y terroristas y por lo tanto vulnerables a los retos y amenazas delictivas y violentas; ante ello es importante retomar su importancia y señalar la necesidad de crear políticas específicas para dar seguridad en estos lugares. La criminalidad y el terrorismo se desarrollan en los lugares donde encuentran mayores facilidades para llevarse a cabo: la debilidad de los estados para la aplicación del estado de derecho; sociedades propensas a tolerar sus actividades; la capacidad de hacer pasar desapercibidas sus actividades; agravios de un grupo social, entre muchas otras, definen en gran medida el desarrollo de sus actividades ilegales. El terrorismo, para ocasionar el mayor daño y destrucción posible y la criminalidad, para hacer llegar sus servicios y productos al mayor numero de clientes, aprovechan las características de las metrópolis. La alta densidad poblacional, la complejidad de las interacciones e intercambios y su importancia para los valores y prácticas nacionales hace que podamos considerara de las metrópolis como espacios vulnerables a las actividades ilegales. Las metropolis son atractivas a tanto para terroristas como para criminales. Los primero obtienen publicidad y su ataque puede ocasionar mayor número de víctimas, cada vez que atacan una ciudad; y los segundos encuentran con mayor facilidad a los clientes de los servicios o productos ilegales que ofrecen.  Las complejas interacciones sociales, económicas y políticas, hacen que tanto el terrorismo como la criminalidad se desarrollen y pasen desapercibidas en las ciudades; y la importancia para los valores y prácticas nacionales hacen que sean blancos...
Michoacán ¿El futuro “Ayotzinapa” del Presidente Lopez Obrador?

Michoacán ¿El futuro “Ayotzinapa” del Presidente Lopez Obrador?

Michoacán sigue en proceso de deterioro. Desde aquel “Michoacanazo” (así llamado por la detención de 11 presidentes municipales, 16 altos funcionarios del estado y a un juez local) que dio el Ex presidente Felipe Calderón Hinojosa (FCH) y la intervención político-militar del Ex presidente Enrique Peña Nieto (EPN) con Alfredo Castillo (como Comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán) en la entidad no se ha logrado ejercer un control estable y sostenido ya sea político o militar sobre autodefensas y criminales. El problema es relevante en este momento, por que pareciera que tanto autodefensas como organizaciones criminales están saliendo de su repliegue táctico al que fueron sometidos con las intervenciones antes mencionadas. La información indica que pronto estarán listos para volver a irrumpir en la esfera nacional, tomando en cuenta que de la esfera local nunca se fueron. Es importante resaltar que FCH y EPN fracasaron estratégicamente en la región por varias razones: No pudieron evitar el surgimiento de la familia michoacana ni de las autodefensas No previnieron el involucramiento de la colusión entre criminalidad y clase política Ambos gobiernos perdieron control político y de seguridad sobre el Puerto de Lázaro Cárdenas. FCH se limitó a fracturar al grupo criminal de la familia michoacana. Sin embargo, no alcanzó a sostener y mucho menos a ganar alguna batalla decisiva en contra de la criminalidad que le permitiera tener una estabilidad en el largo plazo sobre la región. EPN y Castillo tan solo se limitaron a fracturar a las autodefensas para dividirlas entre las afines al gobierno y las rebeldes. Tampoco buscaron obtener victorias importantes (políticas, sociales, económicas...