¿Está México preparado para la guerra?

¿Está México preparado para la guerra?

La invasión del gobierno ruso a Ucrania plantea el primer conflicto del siglo que hace recordar la bipolaridad y pone en ciernes lo que podría llamarse la III Guerra Mundial. Las acciones militares rusas, los apoyos recibidos por Ucrania por algunas democracias occidentales y la neutralidad China, hace que la invasión y su escalada tenga repercusiones globales de graves consecuencias para México. México es, hasta el momento, un país pacifista con capacidades militares limitadas para enfrentar amenazas y retos internos. No es un país que ponga en riesgo a otras naciones por lo que es impensable su participación militar en lo que bien podría configurarse como la III Guerra Mundial. Por lo menos, no de una forma convencional, con el envió de armas y tropas fuera del esquema de los ejércitos de pacificación de la Organización de las Naciones Unidas. Esta vocación pacifista no implica que, en caso de guerra, México pudiera continuar con el discurso de neutralidad que fue medianamente funcional hasta el siglo pasado. Su posición geopolítica, las nuevas formas de combate y la globalización e interdependencia, hacen que el territorio mexicano, a diferencia de otros, sea uno más de los codiciados espacios de batalla; ante ello, es pertinente preguntarse qué tanto la Nación se encuentra preparada para una guerra de escala mundial. En caso de que los Estados Unidos sean parte de una guerra mundial, nuestro país, por vecindad y relación estratégica, se vuelve un actor relevante. El intercambio comercial, suministro de recursos naturales, de materias primas e inclusive de insumos de la industria militar harían de México un blanco natural para el adversario. El ataque...
La (obsoleta) regulación de la Seguridad Nacional mexicana y el futuro del planeta

La (obsoleta) regulación de la Seguridad Nacional mexicana y el futuro del planeta

El marco normativo de Seguridad Nacional necesita, con urgencia una renovación y actualización, que lo coloque acorde a los nuevos y a los tradicionales retos y amenazas. La ley de Seguridad Nacional actual es inadecuada para cumplir su función y hasta el momento parece que no ser un tema de interés para la 4a Transformación, quien, al igual que los gobiernos anteriores, continuará perdiendo tiempo en su adecuación a un mundo convulso que avanza a pasos agigantados y en que se deja en el camino a quienes no pueden seguir el paso. Por primera vez en la historia moderna se comienza a tener conciencia de que nuestro planeta puede dejar de ser habitable en un futuro no tan lejano. El cambio climático, todos los días y en todos los lugares, nos recuerda su presencia e impacto en nuestras vidas diarias, así como, la necesidad de revertirlo. La inhabitabilidad de regiones, continentes y potencialmente todo el globo terráqueo nos hace conscientes de la importancia de la prospectiva y de pensar las consecuencias que el presente traerá para un futuro incierto. Para naciones como México, sumergidas en el ahora y lo inmediato, haciendo esfuerzos para subsanar los retos del pasado y mejorar poco, muy poco, las condiciones y desarrollo económico, social y político presente, pensar a futuro es una práctica extraña, que generalmente se deja a naciones más desarrolladas, quienes, en la práctica y por encima de las soberanías, deciden sobre el futuro de todas las naciones del planeta. México, al igual que las naciones en desarrollo, lucha desde hace décadas en contra de fenómenos gestionados, y en pocos casos superados,...