Identificación de personas para la seguridad

Identificación de personas para la seguridad

En las pasadas semanas se volvió a presentar la discusión sobre la recolección y resguardo de la información sobre los mexicanos con fines de seguridad. Este tema, nodal para el estado de derecho y un sueño desde hace décadas para las instituciones de seguridad y justicia, implica revisar paradigmas sustanciales relacionados con la libertad, la privacidad y la confianza en las instituciones del Estado en los que rara vez existe un acuerdo. La información es la base de la seguridad, identificar los hechos y las personas para prevenir, contener o castigar las conductas antisociales, las faltas o los delitos, hacen necesaria la recolección de datos sobre las personas y los lugares. Los no tan nuevos modelos de policía (el guiado por inteligencia, por la comunidad o el de precisión) al igual que el Modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica que impulsa la 4T, tienen como base la recolección de información y la producción de inteligencia para la toma de decisiones y la acción policial. El avance tecnológico permite que cualquier institución de seguridad aumente las capacidades de recolección, resguardo, gestión y análisis de la información, cuestión que permite desarrollar infraestructuras complejas en tiempo real de información que buscan facilitar los procesos, eficientar el uso de recursos, mejorar los resultados, así como, aumentar la legitimidad institucional. Por ello, de diferentes formas y en distintos niveles, las instituciones de seguridad de todas las naciones recopilan y resguardan información sobre las personas, hechos y lugares. A nivel global sobresalen los sistemas creados para las instituciones de seguridad de los Estados Unidos de América, China, Rusia y algunas de la Unión Europea,...
Aguililla y Culiacán: la necesidad de desarrollar un nuevo modelo de inteligencia criminal

Aguililla y Culiacán: la necesidad de desarrollar un nuevo modelo de inteligencia criminal

El Gobierno Federal ha manifestado públicamente que ha optado por una estrategia de reducir los enfrentamientos directos con la delincuencia. Esa lógica también la siguen de forma abierta u oculta algunos gobiernos estatales y municipales, sobre todo los emanados de MORENA y algunos otros que quieren ser bien vistos por el Presidente. Esta estrategia pudiera ser discutible, sin embargo, lo que no debería estar sujeto a debate es que los gobiernos renuncien a la capacidad de mejorar sus instrumentos de recolección de información para anticiparse al futuro. Es decir, independientemente de que se favorezca mas la paz que el conflicto, la necesidad de conocer los movimientos del adversario criminal no puede desdeñarse y tiene que seguir siendo una prioridad gubernamental (en los tres niveles) para tener ventaja operativa y estratégica sobre el enemigo. La masacre de policías municipales en Aguililla, Michoacán y lo sucedido el día de ayer en Culiacán, Sinaloa refleja no solo que los criminales tienen más información que las autoridades, sino un doble error en el modelo de inteligencia criminal en México que se ha venido repitiendo tanto a nivel federal como a nivel estatal y municipal. En primer lugar, el poco uso que la autoridad le da la información que se genera con antelación y que impacta sobre la probabilidad de que ocurra un evento futuro. En términos estrictos, la inteligencia no tiene un modelo de estimación de probabilidades que reduzca el riesgo de las personas que están en campo. Esto se observa todos los días, ya que cuando se realiza una diligencia policial o se lleva acabo alguna operación rutinaria, se sigue optando por...
¿Qué influyó para la fuga del Chapo?

¿Qué influyó para la fuga del Chapo?

Todo sistema de seguridad debe (o debería) estar diseñado para funcionar en tres momentos distintos: el antes, el durante y el después de una situación de peligro. Esto mismo aplica tanto para sistemas de seguridad en el nivel internacional, como de seguridad nacional, seguridad pública o seguridad privada. Para cubrir las necesidades de los sistemas de seguridad en estos tres momentos, éstos se construyen a partir de la suma de diversos compontes como pueden ser los tecnológicos, los procesos, el recurso humano, entre otros. El hecho es que el uso y la preponderancia de los componentes dependen, por una parte, del nivel de seguridad requerido o solicitado y por otra parte de la cultura del propio líder o diseñador del sistema de seguridad, esto es, habrá quienes consideren de antemano que los componentes tecnológicos son la base de un sistema de seguridad u otros que sostengan que el componente humano es el más importante. Sobre estos y otros paradigmas se construyen los sistemas de seguridad en cualquiera de los niveles antes mencionados. No obstante si habláramos de buenas prácticas, de empresas capaces y buenos diseñadores y líderes, los sistemas de seguridad tendrían que construirse con seis componentes armonizados a partir de un enfoque sistémico (no preponderancia de uno sobre el todo): humano, tecnológico, información, procesos, ley y sinergia. Estos componentes tendrán que ser colocados en cada uno de los momentos antes mencionados para lograr un sistema de seguridad eficiente, efectivo y eficaz. Otras dos características de un buen sistema de seguridad es que deben ser sólidos y estables. Citando algunas definiciones dadas durante la construcción del Proyecto Justicia Efectiva...