Reynosa: la violencia del negocio criminal

Reynosa: la violencia del negocio criminal

La ciudad de Reynosa en Tamaulipas, una vez más, se volvió noticia de violencia el pasado 19 de junio. El homicidio de 15 personas demostró la ausencia e incapacidad de las instituciones de seguridad federales, estatales y municipales para hacer frente a células criminales. Este tipo de hechos violentos demuestran el reto que implica la criminalidad y la forma en que se puede ejercer la fuerza en los procesos de gestión de sus negocios. Las organizaciones criminales hacen uso de una serie de herramientas para la gestión de sus negocios, siendo la violencia una de las principales. Se utiliza internamente para ejercer control sobre las unidades administrativas y productivas; hacia afuera, para enfrentar a la competencia, a la estructura reguladora, las autoridades, y advertir a los ciudadanos. De ninguna forma un fin, sino una actividad más del negocio criminal para mejorar su posición en el mercado. El nivel de la violencia, su exhibición y el nivel de riesgo que conlleva, suelen estar relacionados con los objetivos y las formas de comprender las consecuencias de su uso. El homicidio paulatino de personas suele pasar desapercibido, mientras que los atentados en contra de población no combatiente tienen un impacto social local, que, en algunos casos, como en Reynosa, trasciende al ámbito nacional y que en raras ocasiones a lo internacional. La violencia criminal en pocas ocasiones tiene un impacto social que trascienda en el tiempo. La generalización de hechos violentos satura a las audiencias, quienes desesperadamente e incitadas por el miedo, buscan racionalizar la violencia y aislarse o distanciarse de ella. Para ello, las personas crean barreras físicas e imaginarias para...
Los ataques en Reynosa Tamaulipas y la Guardia Nacional: escenarios comunes

Los ataques en Reynosa Tamaulipas y la Guardia Nacional: escenarios comunes

Desde el 2019 en CIS Pensamiento Estratégico alertábamos del riesgo que representaba para el clima de inseguridad en México, el diagnóstico limitado sobre la inseguridad en el país que el presidente López Obrador y su equipo habían hecho. De forma específica hicimos 4 señalamientos. El primero era que no podían basar su estrategia en la tesis de que solo es posible enfrentar a la criminalidad a partir de un rediseño institucional que elimine prácticas corruptas anteriores, ya que esto solo representa una pequeña parte del problema de inseguridad. El segundo era que, al seguir esa ruta del rediseño institucional, éste tomaría tiempo (que no se tiene porque era necesario dar resultados rápidamente) y que solo provocaría la oscilación del péndulo por un tiempo, pero no garantizaba algún éxito en el mediano y largo plazo y que la situación regresaría nuevamente a niveles de inseguridad francamente alarmantes. El tercer señalamiento consistía en señalar que el problema no era la Policía Federal. Si somos objetivos, la Policía Federal y la gran mayoría de sus elementos habían mostrado evolución, compromiso, integridad en infinidad de sus operativos y que esas historias negras que había no representaban las políticas institucionales ni a la mayoría de sus mujeres y hombres. Eran casos específicos que había que señalar, sancionar y corregir para evitar que volvieran a suceder pero que, así como los norteamericanos no deshicieron a la CIA por los errores cometidos en el 9/11 sino más bien la reforzaron, tampoco México debía destruir a la institución solo por los errores de unos pocos. El cuarto señalamiento era que el cambio de inteligencia nacional a inteligencia...
¿Cuál es la consecuencia de no tener el programa para la Seguridad Nacional y el Sistema Nacional de Inteligencia?

¿Cuál es la consecuencia de no tener el programa para la Seguridad Nacional y el Sistema Nacional de Inteligencia?

Uno de los grandes fracasos del gobierno mexicano que encabeza el presidente López Obrador ha sido la seguridad. Probablemente no por falta genuina de voluntad, pero los hechos indican que no se han reducido sustancialmente los índices de criminalidad y la violencia sigue ganando terreno a la población.   Aunado a lo anterior, también preocupa que las acciones del gobierno parecen tener incluso contradicciones sobre cómo atender el fenómeno de la inseguridad. Se observan posturas diversas, especialistas dentro de su gobierno que no son escuchados y nadie parece poder decirle al presidente que su política en materia de seguridad ha sido y seguirá siendo un error mientras siga por la misma ruta. Ya en otras entregas hemos abordado que el fracaso del gobierno en temas de seguridad se puede deber a la forma vertical como el presidente toma decisiones, al haber reducido al CISEN de una inteligencia nacional a una instancia que solo analiza la inteligencia criminal, o a una Guardia Nacional que debido a su diseño iba a tardar mucho en poder ser eficiente y efectiva, etcétera. Pero también falta analizar el impacto que ha tenido tanto en el plano operativo como en la coordinación entre instancias el que el presidente no haya presentado ni el Programa para la Seguridad Nacional, ni una propuesta para crear el Sistema Nacional de Inteligencia (SNI). Sobre todo, el Programa para la Seguridad Nacional es un documento clave y que tuvo ya dos ediciones previas, la primera que se presentó en 2007 y la segunda en 2013 al inicio de la respectiva administración presidencial. Es un documento con visión de 6 años...
La actualización del modelo de policía local para mejorar la seguridad en México

La actualización del modelo de policía local para mejorar la seguridad en México

Los esfuerzos federales, para fortalecer las instituciones de seguridad locales, realizados por la Secretaría de Seguridad Ciudadana y Protección Civil comienzan a dar resultados con la implementación de modelo nacional de policía y justicia cívica. El modelo pretende actualizar las instituciones de seguridad y dotarlas de prácticas basadas en evidencia utilizadas, con resultados positivos, en las democracias occidentales para reducir la criminalidad y la violencia. Una de las deudas de los actores políticos es la creación de instituciones de seguridad para enfrentar tanto la delincuencia común como el crimen organizado a nivel local. Por más que se quiera convencer que una fuerza federal podrá tener presencia y capacidades de investigación en todo el territorio mexicano, la debilidad de un régimen democrático y de libertades terminan por desmentirlo. El fortalecimiento de las instituciones locales es una opción para disminuir la inseguridad que impera en el país. Los esfuerzos en estados y municipios para mejorar las instituciones son varios, algunos con buenos resultados; muy pocos de ellos premiados por el voto popular y el reconocimiento de las capacidades técnicas de los operadores. Pues hasta el momento, mejorar la seguridad en contadas ocasiones es una variable que incida en el reconocimiento ciudadano que se emite por medio del voto. Los alcaldes y gobernadores tienen pocos incentivos y herramientas para hacer frente a los fenómenos delictivos. En la mayoría de los casos son vulnerables a las camarillas político-criminales que reinan en sus territorios, cuando la misma estructura institucional no es parte del gobierno criminal. La corrupción endémica se alimenta de escasos recursos financieros, dificultades para el reclutamiento, oficiales desmotivados con pocos conocimientos e...
¿Y después de Durazo?

¿Y después de Durazo?

El pasado 1 de octubre, en el seminario sobre Violencia y Paz de El Colegio de México, el Dr. Alfonso Durazo, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), abrió la posibilidad de dejar su responsabilidad para competir en las elecciones a gobernador en Sonora. El hecho, previsible desde que aceptó el encargo presidencial, implicará un nuevo liderazgo que, a corto plazo, tendrá que lidiar con la postergada reforma policial y producir resultados en uno de los temas prioritarios para el país. La titularidad de la seguridad durante el presente siglo ha sido ocupada por 8 hombres: 4 abogados, 1 ingeniero, 1 médico naval, 1 administrador de empresas y 1 ingeniero/abogado. De ellos, los abogados han sido lo que han dirigido el mayor tiempo: 8 años; un ingeniero fue titular 6; el ingeniero/abogado 3; y el médico naval y administrador de empresas lo fueron por 1 año. Los encargos más cortos, de 1 año, fueron de 2 abogados y el administrador, mientras que el de mayor duración fue de un ingeniero. De estos 8 hombres, 1 actualmente dirige la seguridad (Durazo), otro es titular de la Fiscalía General de la Nación (Getz Manero); otro aspira a la gubernatura de Campeche (Sales); 1 se dedica a la consultoría (Rubido); 2 se encuentran en retiro (Mondragón y Medina Mora); 1 falleció (Martín Huerta) y el último se encuentra detenido en EU (García Luna). De estos 8 hombres, 7 al momento de aceptar el encargo tenían experiencia amplia y probada en el campo de la seguridad y en la investigación y prosecución del delito, el actual titular, Alfonso Durazo, no....
Una policía para la nueva realidad en las ciudades

Una policía para la nueva realidad en las ciudades

Como consecuencia de la pandemia, se están produciendo cambios importantes, en los sistemas sociales, políticos y económicos, a tal grado que se pronostica que, a su final, el mundo habrá cambiado y creado una nueva realidad. Esta idea, fundamentada en las implicaciones de las modificaciones que hemos realizado en dichos sistemas en los pasados nueve meses obliga a pensar que tipo de instituciones, específicamente las policiales, vamos a necesitar y desear en la nueva realidad. A nivel global, los cambios en la vida de las personas son palpables. Las sociedades y sus gobiernos, con la intención de disminuir los contagios y las muertes de las personas, aplicaron medidas de distanciamiento social y de confinamiento que modificaron las relaciones humanas. Como consecuencia, se presentaron retos económicos para gran parte de la población, en especial esos cientos de millones que viven al día. La delincuencia y violencia modificó sus patrones de comportamiento; la distribución geopolítica se modificó y algunas actividades económicas, hasta antes de la pandemia indispensables, no se han logrado recuperar de su suspensión. En las relaciones humanas, la desconfianza hacia el otro y la irresponsabilidad de muchos, demostraron la debilidad de los lazos humanos, la falta de solidaridad y el enfrentamiento de ideas. La policía, una de las instituciones más conservadoras y adversas al cambio, tendrá que hacer frente a las consecuencias de esta situación y hacer esfuerzos para reconsiderar y replantear su función en esta nueva realidad. Particularmente, las instituciones creadas y desarrolladas para dar seguridad en las ciudades deberán atender nuevas demandas y escenarios, en estos lugares que, por sus particularidades, se han visto seriamente impactados por...